Seis: Q/A automático


¿Me vas a decir preguntar si todavía tiene sentido escribir sobre esto?
Todo por la anécdota, recuerda.
Creo que no podría darte una mejor respuesta.
Al menos, tú no las quisiste nunca.
Tampoco las querrías ahora. Así que veámosla como una pregunta retórica.

Yo, por otro lado, soy un apasionado por hacerme las preguntas que importan un poco tarde.
Como tú ya decías, soy un poco lento.
Me pregunté tarde, ¿cuál era el verdadero propósito de haberte querido?
No es que necesites una razón para enamorarte de alguien. Pero ese querer te tiene que movilizar, permitir evolucionar y entregarle algo al alma de cada uno de los implicados.

Quise salvarte. Ya me había centrado en mí más del tiempo acostumbrado, que no sabía cómo manejarlo. Te encontré y era óptimo dejar de sentir ese egoísmo y escapar. Dejé de concentrarme en mí y decidí a tu red de vida, con todo lo que ella tenía. Y me hizo feliz ayudarte, me alegró un montón reírnos juntos y disfrutar del bullying de una manera en que no lo hacía ya hace cierto tiempo. Pero sea lo que sea que hubo en tu cabeza (y en la mía), la realidad que traspasaba nuestra imaginación no era más que una relación coja, inclinada hacia un lado único de la balanza. Me querías como a un padre y eso en cualquiera de sus definiciones, carece de lógica y amor propio.

Entonces, creo que la única 'revancha' que me voy a dar la licencia de tomarme (porque si no queda obvio con las comillas, no creo en ellas y en sus resultados) es poner todo el peso de la relación sobre mi lado de la balanza y sentirme escuchado. Porque al final, es la mejor manera de proyectar mi voz y (en este caso) mis letras.

A continuación, una serie de preguntas que no tengo idea si quieres hacer, pero que no tengo la duda que jamás te atreverías a hacerme:
¿Te quiero?
Sí. Pero diferente.

¿Por qué?
No tiene nada que ver con tu respuesta negativa. Esto es más relacionado a la cara de la moneda que me mostraste cuando lanzaste nuestra amistad al irte y te comenzaste a alejar. Hubo tanta confianza y tú esperaste el peor contexto para lanzar comentarios hirientes y contar las experiencias más fuera de lugar. Y sí, nuestra amistad literal la echaste a la suerte.

¿Qué somos?
Amigos, no los mejores y no creo tampoco que quieres que lo seamos.

¿Aún te ayudaré en la necesidad?
Definitivamente, somos amigos. Y yo te dije que no esperaría nada a cambio por socorrerte. La verdad es difícil esperar algo de ti, después de entender tus decisiones.

¿Esto es una carta de despedida?
Dado el contexto del día que representa, sería factible afirmarlo. Pero no. La verdad cerrar ciclos con las personas no implica necesariamente alejarlas de tu vida y quizá eso en cierta forma debería ser una lógica universal. Cambia el fondo, no necesariamente el fondo.

¿Entonces?
¿Lo ves? No eran tantas preguntas después de todo.

Aunque...
Yo sí tengo una última.
¿Te gustaron aquellos dulces árabes?

Silencio y otra página que queda medio vacía. O quizá medio llena.
Por el aprendizaje, lo segundo; mejor.

Pregunta bonus
¿Esta entrada no merecía imagen?
Creo que nunca hubiera encontrado la adecuada.

Comentarios

Entradas populares