El Parque de la inocencia

A veces, cambio mi estilo un poco oscuro, por algo romántico. Y creo que con ello regreso a mis días de inocencia, a la época donde me preocupaba menos y sonreía más, por el simple hecho de estar junto a los que quería; junto a los que me querían.

Este pequeño texto nace de esos momentos de libertad y buenas vibras. Disfrútenlo.

El Parque de la inocencia

Desde el momento en que escapé de casa
para disfrutar de mis horas habituales de libertad
y diversión infantil, y tuve aquel casual encuentro
de inocencia con esa niña en el parque,
todo mi mundo giró en torno a ti.

Desde que ella sacó mis primeras sonrisas,
supe que tú serías quien alegraría mis días,
Cuando mi corazón se aceleró al tomar su mano,
comprendí que a ti te amaría hasta el último latido;
hasta la última fibra, hasta el más ínfimo nervio.
Y cuando sus pupilas se clavaron profundas
en mi pequeño ser ilusionado,
entendí que me hundiría en tus ojos para siempre.

Desde ese, mi primer amor,
supe que tú serías sino el último,
sí el más importante de todos los que vendrían.